31 octubre 2016

PORTACARGADORES UZI x5

  El subfusil Uzi fue durante años un símbolo indiscutible del soldado del Tsáhal. Puesto en servicio secretamente en 1954 y presentado al mundo en el desfile del día de la Independencia del año siguiente, pronto hubo que diseñar cartucheras para portar sus cargadores. Se emplearon diferentes tipos de cartucheras, algunas genéricas para varias armas y otras específicas, como este portacargador para albergar hasta cinco cargadores.
Rafael Eitán, comandante de la brigada paracaidista durante la Guerra de los Seis Días, fotografiado con el equipo de combate que incluye el portacargador de Uzi.
Movimiento de tropas en el Sinaí durante la guerra de los Seis Días. El soldado de espaldas a cámara lleva un portacargador acorde a su arma reglamentaria, un Uzi con culata de madera.
  Desconocemos cuándo apareció exactamente este modelo, aunque empezamos a observarla en fotografías a partir de 1965. La anterior cartuchera solo permitía llevar dos cargadores. Ambos modelos comparten los materiales: loneta de algodón color kaki, cerrado con un botón a presión. El nuevo modelo quíntuple presenta varias mejoras sobre los modelos dobles. Para empezar, ahora cada cargador va alojado en un compartimento separado y cerrado por un botón independiente, en lugar de una tapa única. Además a la hora de cerrar puede escogerse entre dos botones a dos alturas. No tenemos claro su utilidad, quizá dependía si la cartuchera estaba llena o vacía. Otra posibilidad es que se diseñase para portar distintos tamaños de cargadores. Originalmente este modelo está pensado para albergar los cargadores estándar de 20 cartuchos, aunque pueden portarse los superiores de 32, en ese caso no es posible cerrar el botón a presión.
Imagen más antigua que hemos encontrado de la cartuchera portacargadores, aparecida en una portada de la revista Bamahane de 1965.
Maniobras anfibias de la unidad de élite Shaked. El soldado del centro lleva los antiguos portacargadores dobles mientras que el de la izquierda va equipado a mayores con el siguiente modelo.
Una patrulla a lo largo del canal de Suez en 1969 durante la guerra de Desgaste. El soldado de la derecha lleva un subfusil Uzi con su portacargador. / Fotografía Moshe Milner. Fuente: gpophotoheb
            Los portacargadores fueron fabricados por empresas como BenixtexHagor, sello que encontramos en uno de sus laterales, junto al año y el logo del cuerpo de logística de las IDF. Parece que el modelo no cuenta con una versión en espejo, es decir, no existe un modelo con la parte de dos cargadores a la derecha y la de tres cargadores a la izquierda. La diferencia que sí observamos es que los modelos más antiguos contaban con una tira que permite sujetar las trinchas, aunque analizando las fotografías no parece que haya sido una práctica muy extendida.
Los modelos más antiguos (izquierda) cuentan con una cinta para sujetar las tiras de cierre.
Curiosa imagen de un portacargadores quíntuple sujeto a un chaleco salvavidas, llevado por el ministro Moshé Dayán en abril de 1973, durante una visita al buque lanzamisiles INS Reshef. / Fuente: wikimedia

Hasta los años 70 en la Guardia de Frontera o Magav era usual teñir todo el equipo, incluido las cartucheras, en un patrón de camuflaje como el que observamos en este control en el noreste de Israel en noviembre de 1969. / Fotografía Gilles Caron. Fuente: gettyimages
En la parte inferior encontramos unos orificios de ventilación y drenaje.
  El soldado de las IDF cuenta con cierta flexibilidad a la hora de preparar su equipo de combate, no siendo raro que alguien armado con un Uzi lleve cartucheras de otras armas o una mezcla de ambas. En la parte posterior encontramos el sistema de doble enganche de latón compatible para todos los tipos de ceñidores (tanto modelos importados como producidos en Israel), además de dos amplias trabillas válidas para cualquier tipo de cinturón o ceñidor. Al analizar el diseño de las tiras que albergan los anclajes nos queda la duda si en realidad el portacargador no es el resultado de unir un modelo doble con otro triple.
Detalle de la parte posterior del portacargador.
Imagen en la isla egipcia de Shadwan durante la operación helitransportada "Rodas", ocurrida en enero de 1970. El soldado de la derecha lleva la combinación de dos portacargadores quíntuples para su Uzi./ Fuente: archives.mod
En esta otra imagen en la isla de Shadwan tomada antes de abandonar la isla el 23 de enero (tras capturar soldados egipcios y hacerse con un rádar enemigo) observamos la combinación de una cartuchera universal junto a la específica para el Uzi. / Fuente: archives.mod
Versión reducida para tres cargadores. Desconocemos si se trata del original o uno de 5 reducido a 3. / Colección Michel Wijnand
  La guerra del Yom Kipur supuso un punto de inflexión para el IDF en numerosos aspectos. Después de que en las filas enemigas se generalizase el uso del moderno fusil de asalto Kaláshnikov, el subfusil Uzi fue relegado por nuevas armas tales como el Galil y los M16 de importación. Aún así el Uzi seguía siendo una buena opción para distancias cortas, por lo que siguió algunos años más como arma para las fuerzas especiales, de retaguardia y como arma de representación del Cuerpo Femenino. Con el abandono del subfusil desaparecieron también los portacargadores, a su vez superados por los nuevos sistema de equipo tipo Efod.
El subfusil Uzi fue ampliamente utilizado hasta la Guerra del Yom Kipur de 1973. / Fuente: bukvoed
Imagen de 1971 de un entrenamiento de la sayeret Matkal. Como unidad de élite y de comando, emplearon ampliamente el subfusil Uzi. A la derecha observamos al futuro primer ministro Benjamin Netanyahu. / Fuente: isayeret

24 octubre 2016

GORRA CON VISERA

     Una de las prendas de cabeza más habituales dentro de los uniformes de combate de cualquier ejército son las viseras. Es raro encontrar un soldado con la cabeza descubierta, tanto por motivos puramente ornamentales (las gorras los identifican como uniformados) como prácticos, pues protegen de las inclemencias del tiempo. El IDF cuenta con una gorra con visera desde los años 60 para su uniforme de faena ( מדי ב madei bet en hebreo). Suele llevarse cuando el casco no es necesario, aunque también se ve en actos oficiales tales como en marchas y desfiles. Moshé Dayán por ejemplo fue un incondicional de esta prenda, tanto en su faceta de militar como luego de político.
Un soldado de artillería sosteniendo un proyectil de 155mm durante la guerra de Litani de 1978. / Fuente: national_library 
Movimiento de tropas en territorio libanés, julio de 1993, gorras en lugar de casco. / Fotografía Esaias Baitel. Fuente: gettyimages


Durante años la visera verde oliva ha acompañado a Moshé Dayán también fuera de su carrera militar, como en este imagen de 1973. / Fotografía Thomas Hoepker.

     Se trata de una gorra circular flexible con una visera que se ha ido acortando con el tiempo. Está elaborada en color verde oliva, con variantes de tonalidad. En cada lateral cuenta con dos ojales metálicos de aireación. A diferencia de otros gorros como los chambergos franceses o el conocido como gorro "Kova Raful", la visera no cuenta con ningún sello o parche con la identificación del IDF.
Retrato del aluf (אלוף - general mayor en hebreo) Amiram Levin, comandante del Mando Norte en 1996. Lleva una gorra con visera acorde con su uniforme de faena. / Fotografía David Rubinger. Fuente: gettyimages
Dos paracaidistas comprueban la documentación de un vehículo con los emblemas de la Media Luna roja a las afueras de Jerusalén, 1990. Visera y chambergo sirven indistintamente como gorra de faena. / Fotografía David Rubinger. Fuente: gettyimages
     El patronaje y el material también han sufrido cambios desde el modelo de los años 60, aunque desconocemos si estos primeros ejemplares fueron producido en Israel o se trataban en realidad de excedentes de otros ejércitos. De hecho la forma recuerda enormemente a la gorra estadounidense "Cap, Field, Cotton, OD, With Visor" del uniforme M1943 utilizado en la Segunda Guerra Mundial, y el posterior modelo M1951 (aunque este segundo no cuenta con los agujeros laterales de aireación). Los ejemplares producidos en Israel desde 1973 ya no cuentan con una pequeña nuquera que se vio en ciertos modelos estadounidenses.
Observamos la nuquera de la gorra de un reservista en el Sinaí, año 1973. / Fuente: global-report
Unos soldados escriben cartas durante la Guerra del Yom Kipur. El aspecto físico no fue la mayor preocupación por lo que muchos reservistas no se molestaron en pasar por la barbería, haciendo que la gorra resalte de forma cómica.
Durante la celebración de la pascua de 1993 observamos que el soldado encargado de la hágala ha dispuesto la gorra en su hombrera como si de una boina se tratase. Desconocemos si se trata de una práctica reglamentaria. / Fuente: idf
El ejemplar de la izquierda es de los años 70 y el de la derecha de los 80.
     En principio y atendiendo al color verde oliva esta gorra fue destinada para tropas de tierra, ampliamente usada por unidades lejos de primera línea, como artilleros y tripulantes de carros de combate en posiciones relajadas. También durante labores policiales con civiles como patrullas o controles en checkpoints.
     Con el tiempo la gorra fue adaptándose a las necesidades, apareciendo en los años 90 una versión más práctica ajustable a las dimensiones de la cabeza de quien la utilice (desapareciendo así la producción de la gorra en diferentes tallas) y con una entrada en la parte posterior para pasar una coleta.
Un soldado bebe durante una pausa en unas maniobras en 1996. / Fotografía David Turnley. Fuente: gettyimages
Un rav turái (רב טוראי - cabo en hebreo) de la Fuerza Aérea con una gorra verde oliva, un elemento que parece no pertenecer a su uniforme. / Fuente: gettyimages
Un reservista en el Sinaí en 1973 sujeta una gorra con visera, de la cual observamos su interior. / Fuente: global-report
Detalle del interior de la gorra, con año de fabricación y talla numérica.
     Analizando fotografías de los años 60 observamos que la visera de la gorra estaba contorneada por una pieza, no queda claro si en cuero o tela marrón, que desaparece en las gorras de la siguiente década. Este detalle no está presente en los modelos estadounidenses, por lo que nos crea de nuevo la duda de si entonces siempre fueron producidas en Israel o si se trata de reparaciones del IDF de los originales estadounidenses.
En esta imagen en color de la Guerra de los Seis Días apreciamos el reborde marrón de las viseras típica en los ejemplares de los años 60. / Fotografía Gilles Caron. Fuente: gettyimages
El aluf (אלוף - general mayor ) Israel Tal durante la batalla de Rafah en la Guerra de los Seis Días. / Fuente: tsahal

17 octubre 2016

CAMISA AMERICANA OG-107

     El uniforme OG-107 fue el uniforme de faena del Ejército de los Estados Unidos desde 1952 hasta la década de los años 80. Fue empleado por numerosos ejércitos de todo el mundo. En el caso del IDF conocemos la fecha de su adopción de forma muy concreta: octubre de 1973, cuando Estados Unidos comenzó a entregar material militar a Israel como ayuda durante la Guerra del Yom Kipur.
Un reservista posa frente a una tienda que funciona como mesa electoral, en algún lugar del Sinaí en diciembre de 1973, pasada la guerra del Yom Kipur. / Fuente: 421
Este soldado, fuertemente pertrechado con granadas de fusil, viste la camisa OG-107. / Fuente: rotter
     Desconocemos cómo fue denominado el uniforme dentro del Tsáhal (podemos suponer que simplemente como "camisa americana"). El nombre estadounidense original, OG-107 hace referencia al color Olive Green (verde oliva) y el número a la variante de la tela 107, en este caso algodón (por ejemplo el 507 hace referencia a una mezcla de algodón y poliéster introducido en 1978). A lo largo de los años el patrón sufrió pequeñas modificaciones, clasificados en tres tipos, siendo el que nos atañe el type III, aparecido en 1964 y usado ampliamente en la Guerra de Vietnam.

La camisa cuenta con una fila de 6 botones y otros dos para bolsillos y puños. Carece de hombreras.
     La camisa americana es de un color verde más oscuro (verde botella) y de una tela más gruesa que su homóloga israelí. A la hora de analizar fotografías se identifica gracias al patronaje de los bolsillos pecheros y a que carece de hombreras. Esto último se debe en parte a que el uniforme estadounidense no fue pensado para un clima cálido como el de Oriente Medio, donde se está en mangas de camisa prácticamente todo el año. Las hombreras son importantes en el uniforme israelí, pues sirven de ayuda para sujetar las trinchas del equipo y es donde van los galones de oficial. Quizás por eso parece que las camisas solo se entregaron a las clases de tropa y suboficiales, siempre como uniforme de combate o clase B (מדי ב madéi bet en hebreo).
La camisa de los reclutas (izquierda) carecen de hombreras por lo que se tratan de modelos americanos, mientras que el instructor lleva una israelí con el parche bordado en color amarillo.
Distinguimos las camisas americanas de los soldados de ambos extremos gracias a los botones y diseño de los bolsillos. Obsérvese lo laxo de la apariencia militar de los reservistas durante la guerra del Yom Kipur: a las barbas y pelos hay que sumarle el uso de cinturones civiles.

     Como comentamos el diseño de los bolsillos son muy particulares, acabados en pico tanto la solapa como la parte inferior del bolsillo. Los botones plásticos además son más grandes que los israelíes. Otra característica que diferencia a la camisa de los modelos israelíes es la ausencia del parche bordado con las iniciales צה"ל del Tsáhal en color amarillo, ya generalizado en 1973. En su lugar se estampó con tinta las misma iniciales del IDF en color negro, generalmente sobre el pecho izquierdo. Esta misma práctica se llevó a cabo con los pantalones a juego del uniforme OG-107.
Vemos la camisa americana en el soldado subido al animal y se intuye el estampado en tinta con las iniciales צה"ל del Tsáhal. / Fuente: 421
Dos miembros de la sayeret Shaked, las fuerzas especiales del Mando Sur, en 1981. El soldado de la derecha viste una camisa de origen estadounidense. / Fuente: shaked424
     En el interior del cuello encontramos una etiqueta con el tallaje estadounidense, compuesto por dos medidas en pulgadas: cuello y mangas. Una vez en manos del IDF se le añadieron en tinta el equivalente israelí resumido: talla pequeña (letra ק), mediana (letra ב) o grande (letra ג).

Etiqueta estadounidense original con la talla y sello israelí correspondiente, en este caso una talla pequeña o ק en hebreo.
     Las camisas estadounidenses y sus pantalones a juego se usaron durante muchos años, viéndose por ejemplo en la Primera Guerra del Líbano en 1982.

10 octubre 2016

CHAPA DE IDENTIFICACIÓN

     El IDF, al igual que tantos otros ejércitos, cuenta con un sistema de identificación para cada soldado en forma de chapa colgada al cuello, denominada diskit (דיסקית en hebreo). El reglamento obliga a los soldados a portar las chapas en todo momento. La información duplicada ayuda a dejar una copia en el cuerpo del caído al romper la chapa en dos y llevarse la mitad que no está unida a la cadena. De esta forma, el cuerpo puede ser identificado posteriormente, y la parte de la chapa recuperada puede emplearse para confirmar el fallecimiento.
Retrato de un reservista durante la Guerra del Yom Kipur con el diskit al cuello. / Fotografía Romano Cagnoni. Fuente: romanocagnoni
Suez, octubre de 1973. En esta época aún se usaba un cordón para la chapa en lugar de la cadena. / Fuente: israelhayom
No es raro colgar de la cadena pequeños elementos como símbolos religiosos, o como el soldado del centro durante una visita de Isaac Shamir a las tropas, una llave. / Fuente: tsahal
     Las chapas están diseñadas para romperse por la mitad en dos. La información aparece duplicada en ambas mitades, con tres líneas: número militar (מספר אישי mispar ishí en hebreo), apellido y nombre. El número de identificación del ejército es diferente al del documento de identidad nacional. De hecho mientras que el número civil cuenta con nueve dígitos, el militar ha ido pasando de cinco a los siete actuales.

En esta chapa del año 1980 primero va el apellido, luego el nombre y por último el número militar. Este orden no siempre ha sido así.
     A lo largo de los años ha cambiado la forma de distribuir esta información, apareciendo el número personal unas veces en la línea superior y otras como último dato. En cuanto a la orientación, desde los años 90 las líneas pueden leerse con la chapa colgada, mientras que antes se orientaba paralelo a la chapa, obligando a girarla para leerla correctamente.
Soldados en Siria durante la Guerra de los Seis Días. Observamos la chapa con las tres líneas paralelas a la chapa. / Fotografía Stefan Tyszko. Fuente: gettyimages
En esta imagen de un recluta de la brigada Golani en marzo de 2016 observamos la actual disposición de la información de la chapa. / Fotografía Alexi Rosenfeld. Fuente: idfonline
Ejemplo de una chapa tapada, incluido la cadena.
     Entre los combatientes existió siempre la tradición de envolver las cadenas con tela, cinta aislante o cualquier elemento que evite ser detectado por reflejos y que elimine los sonidos metálicos. Más tarde el propio IDF proveyó a los soldados con una funda de algodón en color verde oliva aunque no es obligatorio su uso. Esto nos demuestra una vez más la importancia que dan los altos mandos a que los soldados adapten el equipo a sus necesidades y cómo luego estas prácticas se extienden al resto del ejército.
Ejemplo de ocultamiento de la chapa para evitar ruidos y reflejos. En este caso un falasha (judío de origen etíope) fotografiado cerca de Nablús en 2006. / Fotografía David Bicchetti. Fuente: wikimedia
 Soldados femeninas del batallón Caracal (unidad de combate formada por hombres y mujeres) en 2005. Cubren las chapas con fundas personalizadas con el logotipo de sus unidades, una moda vista desde el siglo XXI. En este caso se llevan por fuera de la camisa, aunque no sabemos si es reglamentario. / Fuente: wikimedia
     En muchos ejércitos las chapas incluyen más datos además del nombre y número de identificación militar, tales como el grupo sanguíneo o la fe religiosa, pero no es así en el IDF. Es curioso que un ejército tan práctico no haya decidido incluir al menos el grupo sanguíneo. Para solventarlo los soldados cuentan con una práctica no oficial que consiste en pintar por la parte de atrás el grupo sanguíneo que facilite el trabajo del personal sanitario en caso de necesitar una transfusión.
El portador de esta chapa pintó con rotulador color rojo su grupo sanguíneo: A positivo.
Observamos la cadena de la chapa en el cuello de un herido atendido durante la Guerra del Yom Kipur. / Fotografía David Rubinger. 
Dos reclutas israelíes de origen etíope en 1983. / Fuente: national_library
     Además de llevar el diskit al cuello, tras la experiencia de la Guerra del Yom Kipur cada soldado lleva la mitad de otra chapa duplicada en cada bota. Esto se debió a los problemas para identificar algunos casos de bajas por impactos en la cabeza (generalmente carristas). Una comisión de la División de Investigaciones Criminales del IDF recomendó la producción de botas con un compartimento para portar una chapa adicional.
El 20 de julio de 2016 un soldado apostado en Metula, en la frontera con el Líbano, se salvó del impacto de metralla gracias a su chapa de identificación. / Fuente: twitter